Los muebles y objetos hechos en mimbre han pasado de ser utilizados solo en el exterior a formar parte de la decoración interior, aportando mayor calidez a los espacios, un toque de textura y frescura en los ambientes.
Son fáciles de encontrar en ferias callejeras, comercios especializados y muchas veces suelen encontrarse piezas interesantes en remates de ocasión.
Aquellas piezas usadas, que están en buen estado, son una buena opción para recuperarlas, darles un toque personal con un poco de color y algunos accesorios que harán de ella una pieza única.
Podrás adaptarlas a cualquier lugar o rincón de la casa (living, comedor, recibidor, dormitorio, etc.) y van con cualquier color que tengas, siempre quedan súper bien y otorgan calidez al espacio.
Basta combinarlos y que hagan juego con algunos almohadones, mantas o tapetes, quizás agregarle accesorios como pompones, borlas o flecos para darles un estilo más moderno.
Una vez más, vemos que continúa la tendencia que reivindica lo natural, el diseño artesanal, partiendo de la base del uso de fibras naturales, teniendo como prioridad el respeto y la conservación del medio ambiente.
Ph: Inspiración Vía Pinterest